3 preguntas y respuestas sobre la energía solar: ¿qué?, ¿por qué?, y ¿cómo?

February 28, 2018 | 10:01 am
pixabay/hans
Paula Garcia
Senior Bilingual Energy Analyst and Energy Justice Lead

Ver la energía del sol siendo aprovechada para producir electricidad a través de páneles solares es algo que encuentro profundamente fascinante. El sol es una fuente inagotable de energía, y su uso para producir electricidad proporciona múltiples beneficios, desde generación de empleos, estabilización de e incluso ahorros en la factura de electricidad para sus consumidores, y mejoras en la salud y el medio ambiente porque es una fuente de energía limpia.

Mas, ¿de qué se trata esta tecnología? ¿Cuáles son sus beneficios? Y, ¿cómo podemos tener acceso a ella? ¡Acá les cuento!

¿Qué es la energía solar?

El sol puede cubrir una parte significativa de nuestras necesidades energéticas. Para esto existen diferentes tecnologías como la energía solar fotovoltaica, la energía solar térmica y la energía solar por concentración.

En esta ocasión me enfocaré en la energía solar fotovoltaica.

  • Esta tecnología emplea páneles solares fotovoltaicos para convertir la luz del sol en electricidad para uso en lugares como nuestros hogares u oficinas para prender las luces o nuestros electrodomésticos. Los páneles son usualmente instalados en los techos de viviendas y edificios, así como en campos, vastos terrenos baldíos o rellenos sanitarios.
  • Su funcionamiento consiste en numerosas celdas, construidas usualmente con silicio cristalino, las cuales al ser expuestas a la luz del sol (la radiación solar) emiten electrones que al ser capturados producen una corriente eléctrica. Esta es una tecnología avanzada, precisa y ampliamente usada.
  • Actualmente en los EE.UU. tenemos más 49 Gigavatios de energía solar instalada (fotovoltaica, en su gran mayoría), suficiente para proveer electricidad a casi 10 millones de hogares.

¿Cuáles son los beneficios que brinda esta tecnología?

Usualmente la respuesta sobre los beneficios de la energía solar recae sobre sus bondades ambientales. Si bien estas son de trascendental importancia, sus beneficios cubren un espectro muchísimo más amplio. Exploremos algunos de ellos:

Sonrisas bajo el sol. Foto: Solar Energy Industries Association

  • Ambientales: Ahora más que nunca necesitamos acelerar el uso de fuentes de energía renovable como el sol, y alejarnos del consumo de combustibles fósiles para contrarrestar las peores consecuencias del cambio climático, como el incremento en desastres ecológicos y pérdida de vidas. Un reciente informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO por sus siglas en inglés) concluye que el gobierno de EE.UU. ha gastado más de 350.000 millones de dólares en respuesta a cambios extremos en temperaturas como incendios e inundaciones; y en Latinoamérica se estima que en este momento 14 millones de personas viven en zonas de alto riesgo. La energía solar es una energía limpia que, contrario al uso de combustibles fósiles,  no contamina el aire ni las fuentes de agua, y no produce gases que contribuyen al calentamiento global.
  • Generación de empleos: La energía solar es una de las industrias que ha creado el mayor número de empleos en los últimos años en los EE.UU. contando actualmente con cerca de 250.000 trabajadores. Muchísimos más que la industria del carbón la cual emplea cerca de 160.000. Y lo mejor es que hay empresas y organizaciones como Grid Alternatives y NAACP brindando oportunidades de capacitación y empleo para que todos para que todos tengamos acceso a la industria solar sin importar el color de piel o el nivel de ingresos.
  • Mejoras en la salud pública: la contaminación del aire y el agua emitida por plantas termoeléctricas de carbón y gas natural está asociada con problemas respiratorios, daño neurológico, ataques cardiacos, cáncer, muertes prematuras y otros problemas de salud. Estos efectos negativos afectan con mayor frecuencia a comunidades afroamericanas, de bajos ingresos y a grupos minoritarios étnicos y raciales quienes usualmente viven cerca a estas plantas. En contraste, los páneles solares producen electricidad sin emitir contaminantes nocivos para la salud.
  • Ahorros: El costo de la energía solar ha caído drásticamente, más del 70% desde el 2010. Esto ha contribuido a que su costo sea competitivo y hasta más económico que lo que cobran las empresas de energía en ciertos estados. Adicionalmente, la energía solar ayuda a estabilizar los precios a futuro; aunque la inversión inicial puede llegar a ser alta, los costos de operación de la misma son bajos debido a que no se debe pagar por su combustible (¡es gratis!).

¿Como podemos acceder a ella?

Existen varias posibilidades para tener acceso directo a la energía solar fotovoltaica, todo depende del uso que queramos darle (para nuestras viviendas, oficinas, aplicaciones agrícolas y muchos más) y la opción financiera que mejor se ajuste a nuestro presupuesto. En esta oportunidad me enfocaré en las dos modalidades más populares para uso residencial (y en una próxima entrada hablaré de las opciones financieras).

  • Sistemas solares fotovoltaicos en los techos de las viviendas. Para poder instalar los páneles en los techos de nuestras viviendas, lo más importante es que el techo cuente con una buena orientación (hacia el sur), que reciba la menor cantidad de sombras y que se encuentre en buena condición.
  • Instalaciones solares compartidas. Si el techo de nuestra vivienda no es apropiado para instalar los páneles, no los queremos en el techo o no podemos instalarlos por vivir en edificios con múltiples propietarios o en arriendo, existen las instalaciones solares compartidas (community shared solar en inglés). La instalación solar compartida consiste en un proyecto solar desarrollado por una organización o empresa que instala una mayor cantidad de páneles en un lugar apropiado. Los subscriptores invierten en el proyecto, compran su electricidad o reciben otros beneficios específicos como créditos para pagar menos en la factura eléctrica.

La revolución en proceso

En este momento, 1.6 millones de casas en los EE.UU. han instalado páneles solares en sus techos (en comparación con tan solo 30.000 en el año 2006). Esto es una clara muestra de cómo la energía solar es una alternativa que funciona, brinda resultados para sus consumidores y contagia positivamente a que más gente quiera tener acceso a ella.

Los invito a que miremos a los techos de nuestros vecinos, celebremos aquellos que ya han logrado instalar páneles solares en sus casas y demandemos políticas públicas que faciliten nuestro acceso a la energía solar.