Los servicios de transporte a través de app, como Lyft y Uber, han cambiado la manera en que las personas se trasladan de un lugar a otro. Mis compañeros y yo acabamos de publicar un informe estimando las emisiones de carbono asociadas a los viajes por estas apps de transporte. Los hallazgos son preocupantes, y hacemos recomendaciones para mejorar nuestras opciones de transporte sin aumentar la contaminación y la congestión. Te invitamos a leer el informe de Unión de Científicos Conscientes, o UCS por sus siglas en inglés, pero aquí enumeramos los cinco principales resultados.
1. Los viajes por app de transporte han registrado un crecimiento exponencial
Los viajes por app de transporte han superado enormemente los servicios de taxi en los últimos años, y proporcionan hoy un porcentaje significativo y creciente de viajes en las áreas centrales de muchas ciudades del país. En el 2012, del total de usuarios de taxi y apps de transporte en Estados Unidos, apenas el 2 por ciento eran usuarios de apps de transporte. En el 2018, este porcentaje pasó a un impresionante 83 por ciento.
2. Los viajes por app de transporte son más contaminantes que los viajes en auto privado
Los autos usados por las apps de transporte tienen una mejor economía de combustible promedia que los autos privados, ya que en general son más nuevos. Esta diferencia puede ser de más del 15 por ciento. Pero aún con esta mejor economía de combustible, si eliges un viaje utilizando este tipo de servicio, tu viaje será significativamente más contaminante comparado con un viaje en auto privado.
La razón es simple: los conductores de las apps de transporte circulan esperando un pedido de viaje, y conduciendo hasta el lugar donde recogen el pasajero. Esta conducción extra, que corresponde a aproximadamente el 40 por ciento de las millas totales conducidas, elimina la ventaja de una mejor eficiencia del auto y causa una contaminación que es un 47 por ciento más alta que la de un viaje en auto privado.
Pero cuando dos o más pasajeros comparten un viaje, lo que equivale a combinar más de un viaje, queda plenamente compensada la contaminación causada por la conducción extra. Y podemos ir más lejos. Un viaje en un auto eléctrico, sin compartir con otros pasajeros, reduce la contaminación en un 53 por ciento comparado con un viaje en auto privado, y un viaje en un auto eléctrico compartido reduce la contaminación aún más, en un 68 por ciento comparado con un viaje en auto privado.
3. Muchos viajes por app de transporte suelen reemplazar otros modos de transporte que emiten menos carbono, como el transporte público, andar en bicicleta o caminar
Parece natural comparar un viaje por app de transporte con un viaje en auto privado. Sin embargo, la verdad es que mucha gente usa estos servicios en vez de tomar el autobús o el tren, andar en bicicleta, caminar, o no hacer el viaje. Con base en encuestas de pasajeros de apps de transporte en California, más de un cuarto de viajes por app están desplazando modos de transporte más limpios. El porcentaje de viajes desplazados que puede ser aún más grande, en particular en las ciudades con alta densidad de población.
Tomar el autobús o el tren, andar en bicicleta y caminar sin duda contaminan menos, así que estos cambios aumentan la contaminación (véase el punto 4 abajo). Pero más allá de la contaminación, estos cambios tienen impactos negativos en las comunidades, como el aumento de la congestión, aire más sucio y menos ingresos provenientes de las tarifas de transporte público, ingresos que podrían ser invertidos en mejorar el sistema de transporte.
Estos problemas son peores en ciudades densas que ya sufren por el efecto de la congestión y que ofrecen escojas de traslado que no implican el uso de autos, como en San Francisco, Boston y Washington DC. Desafortunadamente, estas son las tres ciudades donde Uber y Lyft son responsables por más millas conducidas, comparado con las millas conducidas por todos los vehículos: el 13, 8 y 7 por ciento más, respectivamente.
4. Un viaje por app de transporte emite un 69 por ciento más contaminación que los viajes desplazados
Comparamos las emisiones de un viaje típico por app de transporte con las emisiones promedias de los viajes desplazados (véase el punto 3 arriba). Nuestros resultados muestran que este viaje típico, que es un promedio que incluye el 15 por ciento de viajes compartidos, emite un 69 por ciento más contaminación que los viajes desplazados.
5. Los viajes en autos eléctricos y compartidos utilizados para conectarse al transporte público reducen radicalmente las emisiones de los viajes por app de transporte
Hoy, las apps de transporte aumentan la contaminación. Pero estos servicios pueden revertir la situación aumentando el porcentaje de viajes compartidos y ayudando a los conductores a conseguir un auto eléctrico.
Supongamos ahora que el 50 por ciento de viajes fueran compartidos, y que los autos fueran eléctricos. En este caso un viaje promedio emitiría aproximadamente la mitad de las emisiones de un viaje típico desplazado.
Coordinar las apps de transporte con el transporte público es otra estrategia buenísima: un pasajero que comparte un viaje corto para conectarse a un tren que forme la mayor parte del traslado puede eliminar casi un 60 por ciento de las emisiones comparadas con un viaje en auto privado, y más de un 70 por ciento de las emisiones comparado con un viaje hecho enteramente por app de transporte.
Guiando servicios de transporte a través de app hasta un futuro de transporte limpio
Las compañías de servicios de transporte a través de app ofrecen un conveniente servicio y pueden proveerles a las personas un transporte flexible que complementa no solamente la conducción en auto privado, sino que también a los modos de transporte de bajo carbono, tal como el transporte público, andar en bicicleta y caminar.
Pero basado en su desempeño hoy, no están todavía a la altura de sus posibilidades, y están causando problemas significativos, aumentando las millas conducidas en áreas ya congestionadas y la contaminación proveniente del sistema de transporte. Aunque Uber y Lyft hicieron compromisos prometedores de iniciativas de sostenibilidad, las compañías necesitan empeñarse mucho más para guiar sus negocios en una dirección más limpia, alineada con sus declaradas ambiciones. Necesitan incentivar a los conductores a utilizar vehículos eléctricos, y necesitan animar a los pasajeros a solicitar viajes compartidos y a hacer conexiones con el transporte público de una forma complementaria.
Políticas públicas bien concebidas, a nivel local, estatal y federal, pueden ayudar. Por ejemplo, estructurar tarifas para alentar los viajes compartidos y apoyar al transporte público, y promover incentivos o reglamentos que alienten o requieran que los servicios de transporte a través de app pasen a la electromovilidad.
Y finalmente, el consumidor consciente también tiene un papel importante a desempeñar. Para empezar, pueden insistirles a Uber y Lyft que tomen medidas decisivas para reducir la contaminación por calentamiento global que ellos causan y hacerles saber que esperas opciones mejores para el clima. Los pasajeros también pueden tomar decisiones concienzudas sobre como moverse, como elegir un viaje compartido, como usar las apps para trasladarse a las paradas de transporte público, usar el transporte público donde sea posible, y caminar o andar en bicicleta.